En esta ocasión, la clase comenzó de una manera particular. Alberto proyectó una escena de la pelicula "El discurso del rey", en donde se mostraba a un orador intentando hablar frente a una multitud. Éste orador no podía comunicarse de forma fluida, dejando en evidencia su tartamudez.
Luego de observar la escena, Alberto preguntó a cada uno de nosotros, si de alguna manera nos habíamos sentido identificados o si nos era difícil poder expresarnos frente a un auditorio. Todos dieron sus opiniones; yo di la mía. Sinceramente es difícil para mi poder enfrentar al público, no encuentro el porqué, pero considero que podrá ser por temor a equivocarme en lo que digo o en lo que pretendo explicar. Como comenté en mi presentación, soy músico y no me pongo nervioso al subir a un escenario, he tocado en cientos de lugares y ya no tengo nervios al subir a un escenario, pero el problema es cuando tengo que agarrar un microfono y hablar frente al público. Conté mi experiencia en Da Vinci de la presentación que realizamos al finalizar la carrera, en donde tuvimos un auditorio de unas 300 personas; fue dificil, pero lo pude sobrepasar. Espero poder mejorar esta cuestión en el transcurso de la materia.
Luego de la charla y de escuchar diversas anécdotas divertidas, comenzó la parte teórica en donde pudimos ver en detalle ciertos puntos a tener en cuenta para la exposición oral. Posturas, vestimenta, gestos, fueron algunos de los puntos en donde nos detuvimos. Fue muy interesante.
Luego del recreo, vimos una escena de la película "El espejo tiene dos caras", en donde la protagonista realizaba un discurso muy fluido, atrapante y divertido (prácticamente un monologo de "stand up") frente a una clase universitaria. Fue una inversa comparación con la escena que habíamos visto al comienzo de la clase.
Más tarde, Alberto propuso un juego. El famoso "dígalo con mímicas". Se dividió la clase en dos equipos. Cada alumno debía pasar al frente y sacar un papel de un sobre, dicho papel tenía escrito una palabra, la cuál tenía que ser expresada con movimientos corporales sin utilizar la voz. El equipo debía adivinar la palabra que su compañero/a estaba expresando con sus movimientos. Fue muy divertido y permitió distender la clase y también permitió conocernos un poco más.
La próxoma clase debemos entregar el TP1 (ya lo tengo terminado) y además, tenemos que preparar y contar una anecdota en clase. Todavía no tengo idea de lo que voy a presentar.
Nos vemos en la próxima entrada.
Salud!
Wally